Las bodas de caná. Jn 2,1-12
Dice el evangelista "Tres días después se celebraron unas bodas en Caná de Galilea, y la madre de Jesús estaba allí. Jesús también fue invitado con sus discípulos". Todos estan viviendo la alegria de la fiesta, lo que menos importa en este momento son los detalles, pero, entre todas estas personas que estan celebrando, hay una mirada muy especial, una mirada que no solo ve la alegria, si no que mirando, descubre que algo esta faltando y esto no puede pasar, porque la alegria de la fiesta, tendria un fin. Muchas veces me ha tocado vivir una realidad similar, para mí es dificil descubrir que falta y si descubro, algunas veces decido pensar que no vi nada, ya que el problema presente no es mio, asi que no me preocupa.
En Cana, el problema es de los novios, la madre de Jesús nada tiene que ver ahi, pero ella mirando descubre la necesitad, tiene que tomar una desición y dice al hijo "No tienen vino" su petición sera escuchada, pero tiene que hacer el siguiente paso para que el milagro se realice "Hagan lo que el les diga".
Descubrir que no hay vino en la comunidad, en la parroquia, en el trabajo, en el hogar, en el matrimonio, en el noviazgo, entre los amigos, en la escuela, etc, no es nada fácil y tampoco se descubre nada si yo no entro en relación con el otro. Y si me atrevo a decir que falta vino, tal vez yo vea eso, pero el otro no ve lo que yo veo, entonces la falta de vino se convierte en problema.
Ahora, que importante es esta "mirada" una mirada puede hacer que halla mas vino, o una mirada puede hacer que falte vino. Cuando me levanto y salgo corriendo para cumplir mis deberes o en el transcurso del día, tengo el privilegio que con mi mirada, el otro tenga el vino de la alegría en su vida o con mi mirada hacer, que el otro no tenga el vino de la alegría en su vida.
Ante todo esto, seria mucho mas fácil no entrar en relación con el otro para no mirar, asi me evito de problemas, pero el ejemplo de María en las Bodas de Caná, me motivan a mirar y cuando tengo esta capacidad de mirar y mi mirada produce alegría en el otro, entonces, la fiesta continua...
Agradesco a P. Pachi que nos dio el material "Encarnar la Palabra", me ayudo mucho a reflexionar sobre este camino que día con día tengo que hacer en compañia de mis hermanos. Gracias.
Dice el evangelista "Tres días después se celebraron unas bodas en Caná de Galilea, y la madre de Jesús estaba allí. Jesús también fue invitado con sus discípulos". Todos estan viviendo la alegria de la fiesta, lo que menos importa en este momento son los detalles, pero, entre todas estas personas que estan celebrando, hay una mirada muy especial, una mirada que no solo ve la alegria, si no que mirando, descubre que algo esta faltando y esto no puede pasar, porque la alegria de la fiesta, tendria un fin. Muchas veces me ha tocado vivir una realidad similar, para mí es dificil descubrir que falta y si descubro, algunas veces decido pensar que no vi nada, ya que el problema presente no es mio, asi que no me preocupa.
En Cana, el problema es de los novios, la madre de Jesús nada tiene que ver ahi, pero ella mirando descubre la necesitad, tiene que tomar una desición y dice al hijo "No tienen vino" su petición sera escuchada, pero tiene que hacer el siguiente paso para que el milagro se realice "Hagan lo que el les diga".
Descubrir que no hay vino en la comunidad, en la parroquia, en el trabajo, en el hogar, en el matrimonio, en el noviazgo, entre los amigos, en la escuela, etc, no es nada fácil y tampoco se descubre nada si yo no entro en relación con el otro. Y si me atrevo a decir que falta vino, tal vez yo vea eso, pero el otro no ve lo que yo veo, entonces la falta de vino se convierte en problema.
Ahora, que importante es esta "mirada" una mirada puede hacer que halla mas vino, o una mirada puede hacer que falte vino. Cuando me levanto y salgo corriendo para cumplir mis deberes o en el transcurso del día, tengo el privilegio que con mi mirada, el otro tenga el vino de la alegría en su vida o con mi mirada hacer, que el otro no tenga el vino de la alegría en su vida.
Ante todo esto, seria mucho mas fácil no entrar en relación con el otro para no mirar, asi me evito de problemas, pero el ejemplo de María en las Bodas de Caná, me motivan a mirar y cuando tengo esta capacidad de mirar y mi mirada produce alegría en el otro, entonces, la fiesta continua...
Agradesco a P. Pachi que nos dio el material "Encarnar la Palabra", me ayudo mucho a reflexionar sobre este camino que día con día tengo que hacer en compañia de mis hermanos. Gracias.
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